El Faro de la Mola, situado en el extremo este de la isla de Formentera, se destaca como uno de los lugares más mágicos y espectaculares de toda la región. En este enclave, la naturaleza y el mar entablan una danza fascinante, creando un escenario único.

Ubicado en el punto más alto de Formentera, a 158 metros sobre el nivel del mar, el Faro de la Mola ofrece características notables. Su señal luminosa emite destellos de luz blanca en un ciclo de 5 segundos, visible en un amplio rango entre 150° y 050°. Desde este faro, se disfrutan vistas impresionantes del Mediterráneo, especialmente durante la salida o la puesta del sol.

Desde 2019, el Faro de la Mola se ha convertido en un espacio cultural, sirviendo como centro de difusión del patrimonio marítimo de Formentera. Alberga exposiciones y proporciona un lugar polivalente para conciertos y conferencias.

El Faro de la Mola representa un auténtico símbolo de la isla y es un destino imperdible al visitar Formentera. Su majestuosidad y las vistas panorámicas que brinda dejarán a los visitantes sin aliento.